La temporada de frío está llegando a su fin. Cada vez queda menos para que el buen tiempo se asome por nuestras ventanas y se pegue a nuestra piel, y lo que es más importante, ya no haya que tener puesta la calefacción y por tanto nuestra factura eléctrica (o, en algunos casos, la de gas) se vea completamente reducida. Sin embargo, esto no significa que no tengas que pensar en la calefacción. Precisamente este es un momento perfecto para que eches un vistazo a tus facturas y pienses… ¿realmente necesitas pagar tanto por la calefacción? En este artículo te vamos a ofrecer una propuesta a todas luces singular para que puedas reducir tus facturas energéticas y que no vuelvas a pasar frío.
Elige una tarifa con un precio de la luz y el gas adecuado
Pero antes de meternos de lleno en cómo reducir tu factura de la luz sin pasar frío, es necesario que revises tus facturas de la electricidad. El precio de la luz en 2020 no es único; cada tarifa tiene su propio coste por el consumo siendo la misma electricidad; es decir, es importante contratar una tarifa con un precio de la luz barato para así evitar pagar de más por el suministro consumido. Pero, ¿qué tarifa elegir? Existen muchas opciones en el mercado: las tarifas de Viesgo, de Endesa, de Iberdrola… en fin, ¡demasiadas para que sea fácil de elegir? Una de las opciones de contratación más destacada es, sin duda, la tarifa de último recurso que puedes encontrar en Viesgo y en las demás comercializadoras de para el gas natural y la PVPC para la electricidad. Actualmente puedes encontrar más información sobre esta y otras tarifas de Viesgo en internet, como es el caso del siguiente artículo: https://agua2013.es/viesgo-tarifas/.
¿Cómo hacer que nuestra calefacción sea más ecológica?
Indudablemente, una tarifa de luz o gas a buenos precios hará que se pague menos por la calefacción. Sin embargo, una de las mejores formas de ir más lejos y, además, ser más ecológico, es a través de las chimeneas sin humo. Y es que gracias a la tecnología ahora puedes tener chimeneas sin humo y que no necesitan de obras en cualquier vivienda. Se trata de una modalidad muy limpia y ecológica con la que tendrás un calor a un precio muy económico, sobre todo si tenemos en cuenta que el calor que produce se aprovecha al 100 % – todo lo contrario que en las chimeneas de leña, que pierden parte del calor por el tiro – por lo que toda la energía que tiene se transforma en poder calorífico.
Además, no son contaminantes: El CO2 que emiten es el mismo que dos velas, ¡casi nada! A todo esto hay que añadir la elegancia que tiene una chimenea y que puede darle a tu vivienda el toque de sofisticación que tanto buscas. Y todo ello por mucho menos de lo que imaginas. ¡La también llamada como chimenea ecológica puede ser para ti, y aquí puedes encontrar todas sus ventajas!